La mayor parte de su obra se ubica dentro del campo de la poesía. Es considerado un hito de la poesía argentina contemporánea. Desde allí reacciona contra el yo lírico, a favor del yo dramático con la utilización sobre todo de efectos cómico-paródicos.
Entre sus obras se cuentan El solicitante descolocado (1971), Partitas (1972), Episodios (1980), Circus (1986), Verme (1988) y Odiseo confinado (1992). Ha ejercido una influencia profunda en los poetas argentinos de jóvenes promociones. En 1992 se le otorgó el Premio Leopoldo Marechal en Letras como reconocimiento a su trayectoria.